Es interesante ver como la gastronomía define también a un pueblo y en cierto modo, se expresa, siendo una vía sutil de comunicación.
Porque al alimentarnos ponemos en marcha procesos, por un lado fisiológicos, pero también, indiscutiblemente y no menos importantes, otros ecológicos, psicológicos, económicos o culturales.
Inicialmente, los alimentos se elgen según la disponibilidad pero ya se aplica un modo característico de cocinarlos.
Posteriormente, cada sociedad, según sus creencias y prioridades, desarrollará una serie de reglas, normas de manipulación de los alimentos y relativas al consumo: presentación de los platos, número de comidas diarias, lugares, ayunos, comportamiento del comensal...
Donde mejor se cuida el mensaje, que no la nutrición, es en la repostería puesto que es lo más alejado de las necesidades básicas y lo más cercano al placer. Es el broche de oro de cualquier cultura gastronómica que se precie.
La preferencia por lo dulce es algo innato en nosotros. Se aprende ya en el seno materno y se asocia con algo positivo. En la medida que es vía rápida de energía, el dulce tiene un vínculo directo con el placer.
Es interesante envolverse de la experiencia sensorial que produce la repostería siria.
Esos espléndidos mandalas de hojaldre y miel. Pistachos, almendras, piñones, nueces, anacardos... dispuestos estratégicamente entre mil capas crujientes o envueltos en nidos de pasta hilada. Pirámides doradas y brillantes.
Eñl aire es denso, huele a azúcar y a tostado. Permudes de flor y de rosas, dulces de leche, queso y mantequilla, bombones de dátil, galletas de sésamo y deliciosas pastas de te.
Al viajar a Siria, se podría observasr un sospechoso paralelismo entre las pastelerías y la arquitectura del país (mosaicos, filigranas talladas en piedra, marqueterías, hojas y hojas de historia en sus fachadas, como el hojaldre).
Y no se podía evitar comprender un poco más el carácter de su gente. Un pueblo al que vale la pena descubrir tras muchas capas de tristeza y de cansancio que se intuyen cuando veías el inamovible paso del tiempo disfrazado de frenetismo en las ciudades, pero que allí estaban, como siempre, esperando.
Gastronomía siria (publicado por la revista Siria Magazine) por Aurora Audenis se distribuye bajo una Licencia Creative Commons Atribución-NoComercial-SinDerivar 4.0 Internacional.
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