Damasco no solo tiene casas muy bellas,
cuenta también con una serie de edificios que bien por su construcción o por la
historia que encierran entre sus paredes merecen ser visitados.
La Fortaleza de Damasco
La fortaleza era una ciudad amurallada
dentro de la misma ciudad. Tenía escuela, templo, fábrica e armas, taller de
acuñado de moneda, baño turco, habitaciones dormitorio, casas de palomas
mensajeras, la corte y el trono del rey.
Los romanos construyeron en la parte
noroeste de la ciudad un campamento (castrum) para los legionarios (año 284
después de Cristo).
La forma actual data de la época del
rey al-Adel, hermano de Saladino.
Destruida por los mongoles y los
tártaros (1260 – 1400), fue el sultán Nur Eddin el que la reconstruyó y amplió
trasladando allí su residencia (siglo XII).
Ubicada en la esquina noroeste de las
murallas de la ciudad entre Bab al-Faradis y Bab al-Jabiyah, consiste en un
muro de cortina más o menos rectangular. Originalmente estaban protegidos por
catorce torres de las que solo quedan doce. Posee puertas en los lados Norte,
Este y Oeste.
A sus pies, en el lado norte, rodeada
de jardines se encuentra la estatua ecuestre de Saladino.
Bimarestán al-Nuri
Construido en el año 1154 por el
sultán Nur Eddin Zenki, fue renovado por el sultán mameluco Veevers. Era un
hospital y centro de estudios médicos donde se graduaron grandes médicos de esa
época. Funcionó hasta 1899 cuando fue reconvertido en la primera escuela modelo
para niñas. En 1978 se convirtió en Museo de la medicina y ciencias árabes.
Este tipo de hospital público fue
establecido por los califas y sultanes de la época Omeya que hacían importantes
y cuantiosas donaciones para garantizar la atención médica gratuita a los
ciudadanos.
En sus salas se expone una gran
colección de hierbas medicinales (usadas en el tratamiento de los pacientes),
una colección de instrumentos quirúrgicos utilizados en las intervenciones y
una colección importante de manuscritos médicos y científicos. Además las salas
están adornadas de estatuas de médicos y científicos árabes.
Fábrica de Vidrio Artesanal
En las excavaciones arqueológicas se
han encontrado vasijas de vidrio datadas trece siglos antes de Cristo, por lo
que se deduce que la fabricación de ese material fue inventado en Siria.
En Damasco esta tradición artesanal
(el arte del vidrio soplado) es heredada de generación en generación y junto
con la alfarería es la más antigua artesanía conocida por el hombre.
La materia prima utilizada (vidrio
reciclado) es fundido en pequeños hornos alfareros y hábilmente sobrado por los
artesanos, quienes dan con sus simples instrumentos, vida a graciosas y
esbeltas formas que se convertirán en jarras, floreros, copas y otros bellos
productos.
Hammam Nur Eddin
En el zoco de las especias se
encontraba uno de los edificios más antiguos y mejor conservados de Damasco, el
hammam Nur Eddin. Construido en el siglo XII seguía funcionando en nuestras
visitas.
Damasco / 7 por Carmen Dorado Vedia se encuentra bajo una Licencia Creative Commons Atribución-NoComercial-SinDerivadas 3.0 Unported.
No hay comentarios:
Publicar un comentario