La Alberca al-Hayy (del Peregrino)
La alberca al-Hayy se construyó al lado
de la antigua muralla de la ciudad en la época ayyubí para abastecer de agua a
las caravanas de peregrinos que pasaban por Bosra durante su viaje a La Meca y que permanecían allí
durante diez días esperando la llegada de los peregrinos más retrasados.
También para abastecer el foso de la
ciudadela y los pozos con el agua necesaria. Sus muros tenían ciento cincuenta
y cinco metros de largo, ciento veintidós metros de ancho y ocho metros de
profundidad por el lado este, donde comienza a inclinarse poco a poco hasta
alcanzar la profundidad de doce metros en el muro oeste. En el medio de la
alberca hay una plataforma cuadrada para que descansen los nadadores. Nos
recuerda las que había en medio de los templos paganos orientales; por esto,
algunos arqueólogos creen que la historia del edificio se remonta a la época
romana.
El palacio
Se trata de una de las antiguas
construcciones arquitectónicas más brillantes de Siria. Situado al norte de la
alberca del Peregrino, se pueden ver algunas de sus partes exteriores en las
zonas sur y este.
La fachada de enfrente aún se conserva
y es posible acceder a sus amplias habitaciones y ver los detalles de su
construcción, así como su bella decoración. Este edificio tiene forma
rectangular, con unas dimensiones de cincuenta por treinta y tres metros,
estando la entrada principal en la parte oriental.
Se compone de tres plantas; la más
importante es la del medio que se apoya sobre columnas de estilo ayyubí. En la
parte sur hay restos de una sala amplia con elevados arcos cubiertos de piedra
y muros revestidos de mármol.
Los elementos de decoración y adorno
del palacio eran nichos rectangulares y cuadrados preparados para albergar
estatuas en su interior. Es probable que hubiera sido la sede del gobernador de
la provincia árabe.
El templo nabateo
En gran medida, este templo continúa
oculto por los modernos edificios circundantes, no obstante podemos apreciar
algunas de sus partes, de las cuales la más importante es el arco principal,
decorado con un mihrab y medias columnas con capiteles tallados al estilo
nabateo.
Del examen de los elementos caídos del
edificio deducimos que la fachada estaba decorada con un frontón de estilo
nabateo con influencias helenísticas.
Es de señalar que el edificio del
templo se extiende hacia el este. Allí se levantan medias columnas y sobre
ellas, capiteles nabateos y pilares laterales que soportaban arcos extendidos
hacia el Sur. Paralelos a estas columnas, por la parte norte, aparecen restos
de columnas similares que se localizaban en este lado. Sus grandes capiteles se
pueden ver aún en el suelo.
El Templo Hawriyat al-Ma’ (de las Sirenas)
Se encuentra en la intersección de las
dos calles principales con una de las secundarias, en dirección a la mezquita
Al-Umayri.
Su construcción se remonta al siglo II
d.C, cuando se reestructuró el plano de la ciudad al convertirse Bosra en la
capital de la provincia árabe. La fachada se sitúa entre columnas sobre las que
había un frontón de cornisas y frisos. Detrás de ella se encuentran los restos
de la pila o abrevadero. La fachada se componía de cuatro columnas talladas de
estilo corintio con cuatro metros de alto y un metro veinte de diámetro. Se
sabe que este tipo de edificios se utilizaba para el abastecimiento de agua.
Durante la prospección realizada en
1993 aparecieron todos los detalles del suelo y se alcanzó el nivel de la calle
recta.
Los lugares arqueológicos de Bosra por Dureid Miqdad. Traducción de Dr. Khaled Ghanim y Antonia Navarro Caparrós se encuentra bajo una Licencia Creative Commons Atribución-NoComercial-SinDerivadas 3.0 Unported.
Fotografías por Carmen Dorado Vedia se encuentra bajo una Licencia Creative Commons Atribución-NoComercial-SinDerivadas 3.0 Unported.
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