En el fondo del Atlántico hay un libro. Yo voy a contar su historia. Quizá conozcan su desenlace, ya que en sus tiempos los periódicos lo refirieron y luego algunas obras lo citaron: cuando el Titanic naufragó durante la noche del 14 al 15 de abril de 1912, mar adentro a la altura de Terranova, la más prestigiosa de las víctimas fue un libro, un ejemplar único de los Ruba'iyyat de Omar Jayyám, sabio persa, poeta, astrónomo.
Así comienza esta novela, tomando como hilo conductor los avatares de un manuscrito que, con el nombre de la mítica ciudad de Samarcanda, contiene las famosas "Ruba'iyyat" del poeta persa Omar Jayyám, Amin Maalouf recrea en esta novela un fascinante y tumultuoso mundo oriental.
En el marco de la Persia medieval, desgarrada por profundas contradicciones, dos figuras destacan junto a la del que, además de poeta, fuera astrónomo, geómetra y filósofo: la de Nizam el-Molk, gran visir del sultán Malikxah, y la del misterioso ismaelí Hassan Sabbah, fundador de la secta de los Asesinos, que desde su fortaleza del Alamut mantuvo aterrorizado al país.
Dime ¿qué hombre no ha transgredido jamás tu Ley?
Dime ¿qué placer tiene una vida sin pecado?
Si castigas con el mal el mal que te he hecho,
dime ¿cuál es la diferencia entre Tú y yo?
Omar Jayyám. Libro primero: Poetas y amantes
(...) A veces, en Samarcanda, al atardecer de un día lento y triste, los ciudadanos ociosos van a deambular por el callejón sin salida de las dos tabernas, cerca del mercado de las pimientas, no para degustar el vino almizclado de Sogdián, sino para espiar idas y venidas u hostigar a algún bebedor achispado, al que arrastrarán por el polvo, cubrirán de insultos y condenarán a un infierno cuyo fueto le recordará hasta el fin de los siglos el rojo reflejo del vino tentador. (...)
El paraíso y el infierno están en ti.
Omar Jayyám. Libro segundo: El paraíso de los asesinos
(...) Escoge de la mesa la azufaifa más hermosa, la más roja, la que tiene la piel más lisa y se la ofrece a su hombre, lo que en el lenguaje de las frutas significa "un beso, enseguida" (...) Alamut.
(...) Una fortaleza sobre un peñasco a seis mil pies de altitud; un paisaje de montes pelados, lagos olvidados, precipicios cortados a pico, desfiladeros sin salida (...) Visto desde abajo es una guarida de genios. (...) Alamut significa "la lección del águila". Se cuenta que un príncipe que quería construir una fortaleza para controlar aquellas montañas soltó un ave rapaz amaestrada. Ésta, después de haber dado vueltas en el cielo, fue a posarse sobre ese peñasco. El amo comprendió que ningún emplazamiento sería mejor. (...) Estamos a finales del siglo XI, exactamente a 6 de septiembre de 1090. Hassan Sabbah, genial fundador de la orden de los Asesinos, está a punto de apoderarse de la fortaleza que será durante ciento sesenta y seis años la sede de la secta más temible de la historia. (...)
¡Levántate, tenemos la eternidad para dormir!
Omar Jayyán. Libro tercero: El fin del milenio
Hasta esta página he hablado poco de mí mismo (...) mi nombre Benjamín O. Lesage. A pesar de la consonancia francesa, herencia de un antepasado hugonote, soy ciudadano americano, natural de Annápolis (...) Fue en 1895, al final del verano, cuando embarqué para el viejo continente. Mi abuelo acababa de celebrar su setenta y seis cumpleaños y me había escrito, así como a mi madre, unas lacrimosas cartas. Quería verme, aunque sólo fuera una vez, antes de morir. (...)
(...) La gente del mar no bromea con los signos del destino. Por eso juzgué necesario advertir, en la introducción de mi artículo, que Persia era un término impropio, que los persas llamaban a su país Irán, abreviación de un término muy antiguo, Airania Vaeya, que significa "tierra de los arios" (...)
El Cielo es el jugador y nosotros sólo los peones.
Es la realidad y no una figura retórica.
En el ajedrez del mundo nos coloca y descoloca.
Luego, súbitamente, nos lanza al pozo de la nada.
Omar Jayyán. Libro cuarto: Un poeta en el mar
En el crepúsculo ocre de un jardín rodeado de tapias, una multitud quejumbrosa. (...) Un hombre sale de la sombra, voluntario del dolor. Pies descalzos, torso desnudo, dos cadenas enrolladas en sus manos; las lanza al aire, las deja caer por encima de sus hombros, sobre su espalda; (...) Evito pensar en ello por miedo a recaer en la inevitable melancolía de aquellos que viven entre dos mundos, dos mundos igualmente prometedores, igualmente decepcionantes. (...) lucho para que los persas tengan conciencia de ser hombre libres, "hijos de Adán" como decimos aquí (...) En el nombre del Dios, el que da la libertad, y bajo la protección oculta de Su Santidad, el Imán del Tiempo, queda abierta, en medio de la alegría y bajo los mejores auspicios, la Asamblea Nacional Consultiva (...).
(Beirut 1949)
Escritor libanés que residen en París. Sus libros han sido traducidos a muchos idiomas. En su narrativa, Amin Maalouf mezcla la realidad histórica con la ficción y aspectos de dos culturas tan diferentes como la oriental y la occidental.
Premio Goncourt (1993) por su novela La Roca de Tanios.
Premio Príncipe de Asturias de las Letras 82010).
Miembro de la Academia Francesa.
Autor de las novelas: León el Africano (1986); Los jardines de luz (1991); El primer siglo después de Beatrice (1992); La roca de Tanios (1993); Las esclavas de Levante (1996); El viaje de Baldassare (2000); Orígenes (2004) y Los desorientados (2012).
Autor de ensayo: Las cruzadas vistas por los árabes (1983); Identidades asesinas (1998) y El desajuste del mundo (2009).
Premio de la amistad franco-árabe por León el Africano (1986); Premio de Maisons de la Presse por Samarcanda (1988); Premio Goncourt por La roca de Tanios (1993); Premio europeo de ensayo Charles Veillon por Les Identidades asesinas (1999); Premio Jacques Audiberti ville d’Antibes por El viaje de Baldassare (2000); Premio Méditerranée por Orígenes (2004); Premio Grupo Compostela (2009); Premio Príncipe de Asturias de las Letras (2010).
Samarcanda
Amin Maalouf
Alianza Editorial - Biblioteca Maalouf
Me encantó al leerlo.
ResponderEliminar